Es vasto el universo y sus demonios siempre están hambrientos. Todo aquel que recorrerlo quiera tiene que estar dispuesto a ser devorado de vez en cuando, sea ya de forma parcial y mutilante o sea ya de forma total!!!
Ambas son terribles, pero…
He aquí la pregunta de hoy…
¿Que será más terrible?
a) Forma parcial (mutilación de espíritu, mente y cuerpo, que de forma pusilánime permite la supervivencia de la esencia mancillada) pero deja la consciencia intacta…
b) Forma total (desaparece la esencia del ser y no se es más; sólo una sombra o dijera Nietsche un muerto) sin consciencia claro y sin memoria…
Ser un muerto inadvertido por sí mismo (los hay por millones en este mundo), ser un mutante inadvertido de su origen pero consciente de la pena que su karma lleva, o ser la esencia de los despojos de la batalla; el fénix que aún no nace porque no sabe o no quiere romper el mundo en pedazos (H.H. Demian), lo cual implica ser el Caído, el guerrero muerto en la batalla siglos atrás ya, porque esa batalla, sabes, es conjugada siempre en tiempo pasado, has de saberlo antes de pelearla, porque una vez concluida, no da más ese pretérito espacio para coexistirla, y no hay camino de vuelta. Sólo la ignominia de ser el Caído al borde eterno por la delicia intacta de su peso (Muerte sin fin J. Gorostiza), condenado por los siglos de los siglos amen. O levantar el vuelo como fénix quemándolo todo a su paso. Si, así es… ser la coexistencia pura del fuego con al más frio invierno de nuestro universo, ser la llama que todo lo quema hasta el congelamiento de la ceniza blanca cual copo de nieve (Nirvana, G. Salvatores 1997, Muerte en el frío X. Villaurrútia) que invada la sangre en nuestras antiguas venas. Succionar la sangre del que vive para ser mímica de vida en muerte. O sucumbir y ser el veneno sangre del ritual que acaba por romper la espiral….
Elige pues, cuál has de ser tú en tu próxima batalla…
porque habrá más…
pero no podrás nunca
dar marcha atrás...
eso está garantizado…
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